Como crear una Imagen Corporativa sólida

El secreto de una buena imagen corporativa radica en que vuestra empresa sea lo primero que pasa por la cabeza de los usuarios o clientes al pensar en el sector al que os dedicáis o en las necesidades que vuestro negocio cubre. No es exactamente lo que una empresa transmite sino que es lo que esos usuarios o clientes perciben de ella. Asi que vamos a intentar explicar cómo crear una imagen corporativa sólida

Dado que no existen dos consumidores iguales, es lógico pensar que cada uno de ellos os percibirá de una forma diferente. Por lo tanto, es especialmente importante definir de forma muy concreta cómo interaccionaréis con vuestro público objetivo y cuál va a ser el resultado del uso de vuestro producto o servicio. Esto es algo crucial tanto en el momento de la adquisición del mismo como en las diferentes fases de postventa, para que vuestros clientes puedan tener una experiencia de usuario positiva.

cómo crear una imagen corporativa sólida

Un ejemplo claro de la importancia de la interacción con el consumidor fue la empresa DELL, cuya imagen corporativa transmitía eficiencia, seguridad y solvencia. Un periodista estadounidense adquirió uno de sus ordenadores, el cual presentaba numerosos fallos, y su servicio de postventa no fue capaz de solucionarlos a pesar de que el producto adquirido contaba con una garantía de 4 años. Dicho periodista escribió un artículo que cobró muchísima visibilidad y consiguió posicionarlo en los primeros resultados de Google, lo cual supuso un descenso del 30% en las ventas de la marca durante ese mismo año.

Este descenso fue debido a una crisis de reputación de imagen de marca, debida a una mala imagen corporativa creada en la sociedad, a partir de los comentarios de un cliente muy enfadado por haber adquirido un producto ineficaz y, sobre todo, por el igual de ineficaz trato en los momentos posteriores a la venta.

Antes de comenzar a tratar sobre cómo crear una imagen corporativa sólida, nos gustaría hacer hincapié en algunos conceptos básicos:

Marca Personal

Es la combinación entre lo que el usuario percibe de vosotros y vuestros valores profesionales. Es lo que hace que cada profesional sea único y tenga su propia identidad.

Logotipo

Es un elemento que siempre ha sido fundamental y que actualmente lo sigue siendo. Su misión no es más que recordarle al cliente o usuario una serie de valores y servicios que son los que proporciona y representa vuestra empresa. El logotipo es la imagen, pero no la empresa.

Identidad Corporativa

Es la combinación de símbolos y signos de una empresa. Los elementos identificativos de marca son el logotipo, la tipografía, los colores, el tono con el que os dirigiréis a vuestro público y el eslogan. Al definir este apartado necesitaréis determinar una serie de aspectos:

– Cuándo y dónde usar el logotipo

– Cuál es el tamaño y la forma más adecuada para ese logo.

– Tanto el diseño como el desarrollo de un sitio web, con dominio propio y preferentemente realizado por profesionales, que sea atractivo y os ayude a impulsar vuestra imagen de marca.

– Papelería corporativa en forma de tarjetas, carteles, folios, revistas o trípticos con toda la información acorde a la imagen de marca que queréis proyectar.

Imagen Corporativa

Este término hace referencia a la percepción que el público tiene sobre una marca o empresa. Para trabajar este punto debemos hablar de la combinación de dos factores: actitud e identidad visual.

Una recomendación para crear una buena imagen de marca es realizar un informe DAFO. Con este tipo de informes valoraréis vuestras Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades, y será algo que os ayude a dotar a vuestra marca de los valores y el carácter que deseéis.

Ya que hablamos de visibilidad y de imagen, ¿por qué no aprovechar el mayor escaparate del que disponemos actualmente? Las redes sociales son ese escaparate que nunca habíamos tenido y con el que hace algunos años sólo podíamos soñar para acercarnos a nuestros clientes o clientes potenciales. Hacer un buen uso de ellas acerca la imagen de una empresa a su público objetivo, ya que a través del branding en estos medios conseguiréis:

– Que el público se identifique con vuestra marca, lo que se va a traducir en confianza hacia la misma, o lo que es lo mismo, una imagen corporativa sólida.

– Fidelidad, ya que generaréis confianza entre vuestros clientes habituales y a través de ellos conseguiréis nuevos clientes.

– Reconocimiento a través de las experiencias de los usuarios, posicionándoos como una empresa seria y de confianza. Esto es algo que de nuevo se traduce en más ventas.

Es importante cuidar todos los detalles en el mercado online. tanto los perfiles de las redes sociales, los favicon de las páginas web, la firma de los emails corporativos, infografías, ebooks…

Tener una gran imagen corporativa hace que tanto usuarios como trabajadores se sientan orgullosos de pertenecer a esa comunidad, ya que eso les otorga un estatus. El mejor ejemplo de esto lo encontramos en Apple. Lo que te lleva consumir los productos del gigante Apple no es la estilizada manzana mordida que aparece detrás de sus dispositivos, la manzana es «únicamente» un símbolo. Cuando consumes uno de sus productos lo haces por varias razones: por confianza, porque te proporciona un alto estatus, porque debido a sus precios elevados te hace sentir poderoso… Cuando adquieres un producto de esta marca lo que obtienes no es un dispositivo electrónico, adquieres elegancia, sencillez y profesionalidad. Sabes que estás adquiriendo lo último en tecnología y todo eso te lo transmites a ti mismo a la hora de comprar y utilizar un producto de estas características.

Para que vuestra empresa pueda tener todo esto que admiramos en una empresa como Apple, lo ideal es contar con un departamento de marketing y de expertos en diseño gráfico que os ayuden a preparar y elaborar vuestro manual de identidad corporativa.

Los diseñadores no sólo van a elaborar vuestro manual de identidad, sino que van a desarrollar las diferentes variables necesarias para que esa imagen que queréis transmitir se refleje en todo vuestro trabajo. Vuestro logotipo, tipografías y colores, por nombrar algunos elementos, podrán variar en función de las plataformas a utilizar, pero siempre aportando claramente un valor añadido a que vuestra imagen corporativa sea lo que vosotros queréis que sea.

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